A VECES HAY QUE DAR UN PASO ATRÁS
El FC Barcelona culmina una temporada pésima pero al mismo tiempo para el recuerdo. Una temporada sin títulos pero que supone el inicio del bonito proceso de reconstrucción que ha comenzado de la mano de Xavi. Analicemos esta rocambolesca 2021/22 en Can Barça.
La primera parte de la temporada hacía pensar que podría acabar mucho peor de lo que lo ha hecho. El Barça era un equipo sin alma, noveno en LaLiga y con pie y medio fuera de la Champions League en fase de grupos. La situación con Koeman era insostenible y Laporta la decidió sostener más de la cuenta, hasta asta que, el día 8 de noviembre, Xavi fue presentado devolviendo la ilusión a la afición culé. Muchos la tacharon de exagerada pero no son conscientes de que su llegada al banquillo suponía mucho, la vuelta al camino que nos hizo grandes y con el que lo volveremos a ser.
Los primeros meses de Xavi no fueron fáciles, la plantilla seguía estando plagada de lesiones y los jugadores aún iban recuperándose anímicamente. El gran punto de inflexión fue el mercado de invierno con los fichajes de Ferran, Auba y Adama, que ayudaron mucho al equipo. Los meses de febrero y marzo fueron espectaculares anotando cuatro goles en cada uno de los enfrentamientos contra Napoli, Atleti, Valencia y Real Madrid. El equipo venía de lo más profundo del pozo y esta etapa llenó a la plantilla de euforia, aunque quizá demasiada. Los jugadores bajaron el nivel competitivo y se descolgaron en LaLiga y Europa League cuando todavía eran posibles.
Individualmente hay mucho que comentar. En cuanto a los fichajes como Memphis y los ya comentados de invierno dieron un empujón al equipo. Otros jugadores de La Masía como Gavi y Nico aportaron mucho y sobretodo están llamados a ser el futuro del club. La nota negativa está en Ansu Fati, el 10 no tuvo suerte con las lesiones y no ha podido tener continuidad esta temporada. Y, cómo no, destacar que esta ha sido la temporada de consolidación de Pedri González. Empezó lesionado pero llegó y no tardó en tomar las riendas del equipo, maravillando al mundo con su espectacular rendimiento. Es una bendición para el Barça poder contar con este chico de 19 años con tanto talento en sus botas. Sin duda, el mejor jugador de la temporada, pese a no haber disputado todos los encuentros como el curso pasado.
Esta ha sido una temporada difícil pero que podría haber terminado peor y que en el futuro recordaremos como el inicio de la era Xavi. Por fin hemos vuelto al camino y al estilo que nunca debíamos haber abandonado. El proceso de reconstrucción será largo, pero necesario y seguramente bonito. A veces hay que dar un paso atrás para dar dos hacia adelante.
📝 | David Redondo
